lunes, 3 de septiembre de 2007

LITERATURA: CREACION ABIERTA

EN ESTE ESPACIO VAMOS A CREAR UN CUENTO ENTRE TODOS. VOSOTROS PROPONDREIS LA CONTINUACION Y LA QUE MAS ME GUSTE LA PUBLICARE. QUE OS PARECE? ( QUE CONSTE QUE NO ES POR MI FALTA DE IMAGINACION)
EMPIEZO EL CUENTO:
"

Érase una vez un niño llamado Andrés que acostumbraba a jugar con una pandilla. Andrés no era ni el más alto ni el más fuerte pero era quien manifestaba más imaginación de todos. Un día propuso el juego de adentrarse en el bosque y encontrar un lugar donde esconder los tesoros de la pandilla. A ésta le pareció bien, era perfecto para guardar sus juegos de canicas y sus juguetes.

Así que cada miembro se buscó la manera de escaquearse de sus deberes para quedar en la entrada del bosque. Se dividieron en grupos de dos; como faltó un miembro de la pandilla a Andrés no le importó ir solo.

Hechos los grupos, se adentraron en el bosque de hayas y castaños dando gritos como si fueran a una batalla que iban a ganar. Se dispersaron en cuestión de segundos. Andrés observando los enormes árboles se le desbordaba la imaginación con aquellas formas que tenían. Cada vez había menos luz pues el bosque se hacia tan espeso que era como entrar en una cueva.

Andrés al ver esta dificultad, de ver veía poco, decidió darse media vuelta. Suficiente era ir solo pues sus colegas le podrían dar un susto y ser el payaso del grupo. Sin embargo, cuando se volvió le cayó una hoja de castaño de color azul. Era tan bonita que buscó por es suelo para encontrar más. Quería enseñárselas a sus compañeros. Halló otra más adentro del bosque, y otra más adentro y otras todavía mas adentro… hasta llegar a un claro donde se plantó, delante de un bosque con todos los árboles llenos de hojas azules.

Sus hojas se soltaron al mismo tiempo que él soltó su boca, abriéndola de par en par. No se lo podía creer, se frotó varias veces los ojos, los árboles con hojas azules. Se metió por el camino y fue maravillándose. Vio algo revolotear por un helecho, azul como no, parecido a una mariposa; se acercó y descubrió que era una especie de hada. Se sobresaltó a tal descubrimiento y el hada se rió como el tintineo de una campanilla. El ser de orejas y nariz puntiagudas revoloteó sobre nuestro amiguito, invitándolo a que lo siguiera. Llevado por la curiosidad la siguió. Lo condujo hasta un caballero anciano, vestido con armadura de pies a cabeza, tomándose una siesta. El viejo daba unos ronquidos estruendosos, con lo que daba a suponer que dormía profundamente. El caballero estaba apoyado en árbol de cuya copa salieron más hadas parecidas a la que había encontrado. Hablaron entre sí, y el pobre Andrés solamente oía el tintineo de sus voces. La que encontró señaló hacia el oeste. Él miró hacia aquella dirección y vio que se acercaba un rinoceronte blanco."

QUE OS GUSTARIA QUE OCURRIERA?

9 comentarios:

Anónimo dijo...

¿Estás segura de que quieres que colabore? Te advierto de que puedo convertirte la épica del chavalillo en un slapstick con bichos alados...

XDDDD

B. Za Blonde

Anónimo dijo...

Como leches te envio el texto, por el mail normal o hay algún apartado en el blog que desconozco??

Silvia

MALAQUITA dijo...

para B. Za blonde: aporta ideas que la variedad esta el gusto, ^_^ puede ocurrir cualquier cosa en un bosque donde las hojas sonde color azul. pero oye esto no es pitufilandia eh?

para silvia: lo que se ocurra lo escribes a través de los comentarios. asi de sencillo. ;)

Anónimo dijo...

Oye, sin ofender, eh? Que yo no escribo de pitufos...

Aunque sí de de monturas raras de Dioses indios y de salmones asesinos...

B.Za Blonde

MALAQUITA dijo...

bueno bueno, no seamos susceptibles;
como quereis que siga el cuento?

Anónimo dijo...

Bueno... participar ya participo, tranquila y no me ponso susceptible, es que mis cisnes no son azules, si no blancos XDDDD

Bueno, yendo al grano, hace unos días le envié esto a Malaquita por mail porque ese día en cuestió a este espacio no le dió la perra de dejarme colgar et texto...

Buenó, parece que ahora sí.

pasar, lo que es pasar, no es que pase gran cosa, pero escribí esto en un rato entre tradu y tradu. A mí me resulta interesante y un puen inicio para profundizar en psicología ajena... Y vamos, el primer paso para enviarlo al psiquiátrico para PJs que tenemos montado el gato y yo (los suyos están en el de patologías agudas... XDDD)

B.Za Blonde

Anónimo dijo...

Y el texto es:

Recordaba haber visto en alguno de los reportajes de animales que sus padres insistían en ponerle al mediodía, alguna historia extraña acerca de esa criatura que se le acercaba. Aquél era un reportaje que aburría a las ovejas, pero recordaba bien el impacto que le causó un comentario que oyó en esa voz monótona: que en realidad los unicornios no habían existido jamás. Que una gente de la edad media había sido tan boba que llamó a los rinocerontes unicornios… Cuando oyó esas palabras se quedó tan atónito como se había quedado mientras veía a esa mole con el cuerno en el extremo del hocico. Siempre le gustaron los cuentos de caballerías y a veces se imaginaba a lomos de un unicornio encabritado vestido con una soberbia armadura.
Sin embargo, en ese momento no sabría si esos temblores los producía saber que realmente existían o la animadversión que le producía saber que efectivamente, el unicornio con el que soñaba, ese caballo blanco y regio, no tenía ni sombra de parecido con esa bestia de ojos pequeños y de rechoncha robustez.



B. Za Blonde

Anónimo dijo...

De repente todo se volvió oscuro. Andrés vio como el rinoceronte se le acercaba a una velocidad de vértigo. Era una bestia inmensa, con unos cuernos de dos metros que se aguantaban en una cabeza inmensa, y lo que en un primer momento identificó como un rinoceronte pasó a ser un monstruo sin identificar que tenía un ligero parecido con este animal. Así supo, en un segundo, que lo que se le acercaba era un bestia de otro mundo, de otra época, una bestia que más parecía una reliquia perdida de otro tiempo que un rinoceronte. La sorpresa inicial de Andrés pasó a convertirse en un miedo que lo dejó paralizado ya que la bestia se le acercaba y parecía que tenía un objetivo en su rudimentaria mente: destruir al osado que había traspasado el umbral que separa los dos mundos: Tierra y Ralka.
Justo en el momento en que el extraño rinoceronte iba a embestir con el pequeño Andrés algo tiró de él.
¿Andrés pero porqué tienes esa cara de susto? –era Miguel uno de sus amigos- te hemos estado buscando durante horas.
No… no se que me ha pasado –titubeó Andrés- creo que me he dormido y he tenido un extraño sueño.

Pero Andrés estaba seguro de que no había sido un sueño, él había visto la hoja azul, el hada, el hombre de barba y el monstruoso rinoceronte que le hubiera destrozado de no ser por Miguel, su amigo, el chico que tiró de él y le trajo de vuelta a la Tierra. Pero ¿Cómo había traspasado ese umbral entre dos mundo? ¿Había una fisura espacio-temporal en el bosque en el que había jugado durante toda su vida? ¿Podría volver? ¿Querría volver sabiendo que un terrible guardián le esperaba para eliminar a los intrusos que osaban penetrar en el mundo de Ralka?

Silvia

MALAQUITA dijo...

UAUH!
me ha encantado. Sois geniales!
el domingo cuelgo la continuacion ;)
Esperaré a ver si alguien añade otra cosa...